Cerca

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Pesadillas crepitaron vagando por tejados latosos

en busca de extraviados donde enfundarse

 

Bebíamos entonces nuestras acompasadas exhalaciones

bruma templadora de sueños

 

Esta noche no se detuvieron aquí

 

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Como quien

 

Como quien resbala navaja filosa sobre la piel de su presa

franqueé cada uno de tus filtros

 

Abrí tus alas

como quien abre el libro más atrapante

justo en la página del relato de mayor intriga

 

Y brotaron vocablos, monosílabos y expresiones

en variados lenguajes de surtidos matices

 

Espacios en blanco como nubes peregrinas

surgieron entre puntos suspensivos y comas

 

Un vértigo de frágil barcaza

arrastró los signos de interrogación

hacia tus costas

 

Engrampo tu piel como quien te calza un abrigo

 

Terminas derrotado

He sido destilada

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Tren nocturno

 

El tren repleto de soledades nocturnas

Un asiendo solitario a tu lado

decido acompañarte

 

Dormís acunado por tu hedor mugroso de incierta data

Harapiento de azabache raído

como tu roto corazón que chorrea gastado alquitrán

al ritmo de murmullos incoherentes

 

Almas pusilánimes que aunque  cansadas

te huyen despavoridas

porque te temen

pero no logran herirte

porque de eso, ya tienes de sobra

 

No les sos indiferente

Eres registro del terror de ser

los llenas de inseguridades y vacilaciones

 

Hablarán de tí

Dejarás huella

Aunque solo sea en la noche de hoy

 

Tus huesos y alma aún molidos

sonríen ensueño

 

 

 

 

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Sueño de otoño

En telar de cristal con urdimbre de sedas traslúcidas

entrelacé tersas fibras marinas

 

Me descubriste llegar descalza

estrenada en esa tibia prenda

 

Tu gozosa sonrisa sopleteó mi traje

fundiéndolo en mi piel

 

Llanos e ilimitados

quedamos al descubierto

tu pérdida de juicio

y yo