«Es uno de los símbolos que al hombre
Da el hado o el azar para que un día
De exaltación gloriosa o de agonía
Pueda escribir su verdadero nombre.«
Jorge Luis B.
Te debo una canción que hable
de magnetismo, seducción y plácidos goces.
Te debo un lenguaje diferente, hondo
el pecho abierto, colmado.
Te debo el recorrido sutil y vaporoso de ese mensaje
tan necesario entonces
que se hundió en mi herida para bañarla de cobijo.
Te debo el placer de algunas lágrimas
pero sobre todo te debo dos mágicos instantes;
cuando me descubriste sostenida en el fondo de tus ojos claros
(relajo fugaz, involuntario y franco)
y la contemplación íntima
de la germinación de aquel disco de bruñida plata