ANTIPRELUDIO
Yemas aceitadas
En finas almendras dulces licuadas
Recorren mis hebras desnudas
Ensayando provocadores senderos
Animándolas a arder
Son plumitas destellantes
Derritiendo la conciencia
Levemente perceptibles
Calan sazonando
Ignotos secretos
inexplorados continentes
que comienzan a exudar
libertinos
en oleajes térmicos
su embriaguez
Instigadoras Irresistibles
Devienen perversas
atrayentes fascinadoras endiabladas
para replegarse a decir que No