Sentí cómo me alcanzaba la sorpresa
Goteo interminable de minutos vacíos
Irrumpido sólo por espesos vapores de palabras que
un día fueron fiesta
Te adiviné páramo con molinos debilitados
Que ni el viento logra despabilar
Si la flaqueza llegara a oprimirte hasta estallar
resolví no estar